LA GUARDIA

Apuntas con la mano firme

Tus cañones rozagantes,

Enfrentados con furia y rebeldía

Delante de los miedos y las misericordias.

Apuntas como si fueras a tirar

Tus balas concretas

Humeantes y precisos plomos,

Amenazan las fobias y los anhelos irracionales,

Confrontados al fin

Y cerca del final acechan,

Turbados como nunca antes

Pero fuertes como históricamente.

Apuntas con precisión innata

Tus cañones salvantes

Aceptando roles nuevos y perseverantes

Por encima de todos los males

Y segregando curas ante la adversidad absoluta.

Es temprano para conclusiones

Pero estimo que podrás salvarme… 

ANÍMICO

No pretendo ostentar
siquiera el placer de estar vivo.
La forma, la obsecuencia ósea
Y sus despiadados labios,
Mejorando en estos tiempos
De secretos irresueltos,
Y Valores irrazonables.

No pretendo juzgar
Las proporciones de vuestro asunto,
Ese aroma, pretendo, ahora si,
Un aroma indecifrable y complejo,
Mezcla de flores salvajes
hierbas misteriosas y una pizca de no se qué!
Pero que tan bien sabe en mis labios.

No pretendo ostentar
Siquiera el placer de la muerte,
Dentro de todos los rincones
Mundanos y sobrevalorados,
Llegando de a poco la hora
De volver a reaccionar.

Búsqueda

Quiero buscar aquí
Eso que no veo en otros sitios,
Dispares vértices y altísimos saltos
De filo en fino,
Ya saben muy bien como actuar.

Quiero encontrar allí,
Eso que no busco en otros lados,
Exactos saltos colmados de vértigo
Ya lejos de casa,
Acompañando para siempre
Por la extraña forma que adopto al saltar.

Dos ciudades enteras
hablando de lo mismo,
Despostan mis extremidades
sin piedad ni pulso coordinado.

Quiero por fin, perder
eso que todo el tiempo está conmigo
y ya no puede seguir estando.
Las partes inútiles
De todos los cantos y la mayoría de las mentiras.