Conmueve mis nervios de manera absoluta,
Cuando se esconden escombros bajo la alfombra,
Es sospechoso volver a casa con la sonrisa floja.
Tus ojos han visto en el camino
Monstruos de toda clase
Esos que matan por sangren, los que matan por miedo
Los que envainan mentiras
Y con las orejas matan,
Serpientes, cascabeles y muerte,
Desandando el camino que has visto
Es elemental saber qué has perdido
Y ganado como si fuera poco,
Minutos de luz en la alfombra roja.
Serás, quizás, esa incertidumbre que sospecho
La de las manos limpias y el secreto escueto
Que nos hace parpadear continuamente
Mientras se hace evidente
La espuma sobrada y las olas del mar.
Comulgan estados de ánimos
Rodeando lo vulgar como primera medida
Y, tal vez, un día jugando en la vereda
Despierte de este híbrido sueño,
Que recorre en cosquillas mi pecho
Durante y todavía vibrando,
Escapo a la realidad a veces
Es así como me llamo,
Encuentro realidad a veces
Así es como juntando
Los cables de los entredichos
Dobles sentidos
Y demás yerbas.
La sensación humana de todo esto
Dicho venga a colación,
Es perturbante pues nada resuelve el enigmático caso
Y entonces la memoria se hace dura
Repele nuevamente la sintaxis
Y dos de los hematomas lóbulo frontales.
